Reflexion enviada por el compañero y Lic. Javier Morones Q.
Nadie se acuesta siendo un buen niño y despierta siendo un asesino desalmado.
La calle está sola y el viento levanta el polvo de las aceras, la gente está en casa temerosa, los negocios cierran y el desempleo cunde por todos lados.
Algunos empresarios se han puesto a salvo en el país vecino, otros emigraron al sur, los demás nos quedamos.
Quizás, como decía el sabio griego: Cuando la muerte es, tú no eres y cuando tú eres, la muerte no es, ¿por qué preocuparse?.
Fin de semana: 27 muertos en 24 horas, nuevo récord. Cientos de pequeños empresarios secuestrados, dueños de ferreterías, abarrotes, lavados de carro, consultorios médicos, restauranteros, notarios públicos, viviendo el infierno de la incertidumbre del mañana, familias enteras sumidas en el dolor más profundo que se pueda sentir al saber que su ser querido está en manos criminales.
Los merolicos de los medios de comunicación reclaman seguridad al gobierno, lo mismo que la sociedad, y ¿cómo dar seguridad?
¿Habrá de poner un policía por cada habitante para asegurar que nadie delinca?
Y este policía ¿será seguro o habrá que ponerle también un policía?
Vemos crímenes espectaculares, cadáveres descabezados, destrozados , mutilados y, me gustaría hacerle una pregunta a usted sobre estas bestias humanoides:
¿Qué debe pasar para que un hombre normal se transforme en una bestia que hace esto?
Quienes han visto a estos sicarios los describen como gente joven de 15 a 25 años de edad.
Todos nos preguntamos: ¿dónde esta la autoridad? ¿Por qué no hace nada el presidente?
Y muchas preguntas similares, pero no escucho estas
preguntas:
¿Dónde estuvieron la madre y el padre de estos jóvenes?
¿Dónde estuvieron sus maestros?
¿Dónde estuvieron sus hermanos?
"NADIE SE ACUESTA SIENDO UN BUEN NIÑO Y DESPIERTA SIENDO UN ASESINO DESALMADO, LA TRANSFORMACIÓN ES UN PROCESO PAULATINO".
Es tiempo que dejemos de buscar culpables en otro lado y asumamos la responsabilidad de tolerar una sociedad que se fue corrompiendo y no hicimos nada por evitarlo.
NOS VOLVIMOS PADRES PERMISIVOS Y COMODINOS.
Es mejor hacerte de la vista gorda y no tener un problema con el verdugo de tu hijo o de tu hija.
BUSCAMOS SU APROBACIÓN Y SU ACEPTACIÓN.
Pues claro no “somos” mochos, ni retrógrados, si los medios hacen su lana promoviendo el sexo, pues ya somos adultos, faltaba más, si los muchachos se están apareando sin control, es que “somos” muy modernos, open mind.
¿Qué? ¿A poco te asustan las madres solteras?
¡Uy! ¡eres de la vela perpetua!
Muchas mujeres coleccionan hijos de diferentes padres y tantos otros muchachos presumen y compiten por ver quién embaraza a más muchachas.
Mujeres abandonadas que se prostituyen para mantener a sus crías. Hijos que crecen con la vergüenza y el abandono de sus madres.
Mujeres que trabajan y dejan abandonados a sus hijos, inermes a las bajas pasiones de sus vecinos o de sus mismos familiares.
Padres irresponsables, niños que crecen acumulando odio y desprecio por la sociedad.
Nos burlamos de la decencia y el decoro, sacamos a DIOS de nuestras escuelas, de nuestras casas y, lo más triste, también lo sacamos de nuestra vida. Eliminamos al policía interno que llamábamos conciencia y hoy todo se puede, entre más depravado, más "in".
El Instituto Municipal de Seguridad Pública de Juárez entrevistó a cientos de delincuentes jóvenes: ladrones, asesinos, violadores, narcotraficantes, y casi la totalidad de ellos venían de hogares disfuncionales y buscaban en las pandillas la aceptación que no tenían en su hogar. Las pandillas los obligaban en un principio a delinquir, después ellos mismos le tomaban el gusto a la adrenalina y al sentimiento de poder que da el acto de dominar a otro.
Es cierto que estamos ante un vacío de autoridad y, señores, debo decirles que la autoridad nace en el HOGAR, y ejerciendo esa autoridad deberán transmitir a sus hijos el sentido de la moral.
La moral, ese compendio de buenas costumbres que la humanidad ha ido acumulando en siglos de vida y que hoy tiramos al caño porque “somos” modernos, hoy el grito de la juventud es “ TENER SEXO Y ECHAR A PERDER TODO A TU ALREDEDOR AL FIN QUE YA SE ACABA EL MUNDO...
Los padres se quedan impávidos e inmóviles, nuevamente buscando la aceptación y la aprobación de los hijos, para estar en onda: “no sea espantado, compadre, son los nuevos tiempos”
La única solución al grave problema que hoy tenemos es regresar a ese compendio de buenas costumbres, a los valores universales, a la responsabilidad, al respeto a nuestros semejantes, al civismo, al control de nuestros hijos, a exigir a los MEDIOS DE COMUNICACIÓN que dejen de excitar a nuestros HIJOS con programas que incitan al sexo y la violencia, al libertinaje.
La calle está sola y el viento levanta el polvo de las aceras, la gente está en casa temerosa, los negocios cierran y el desempleo cunde por todos lados.
Algunos empresarios se han puesto a salvo en el país vecino, otros emigraron al sur, los demás nos quedamos.
Quizás, como decía el sabio griego: Cuando la muerte es, tú no eres y cuando tú eres, la muerte no es, ¿por qué preocuparse?.
Fin de semana: 27 muertos en 24 horas, nuevo récord. Cientos de pequeños empresarios secuestrados, dueños de ferreterías, abarrotes, lavados de carro, consultorios médicos, restauranteros, notarios públicos, viviendo el infierno de la incertidumbre del mañana, familias enteras sumidas en el dolor más profundo que se pueda sentir al saber que su ser querido está en manos criminales.
Los merolicos de los medios de comunicación reclaman seguridad al gobierno, lo mismo que la sociedad, y ¿cómo dar seguridad?
¿Habrá de poner un policía por cada habitante para asegurar que nadie delinca?
Y este policía ¿será seguro o habrá que ponerle también un policía?
Vemos crímenes espectaculares, cadáveres descabezados, destrozados , mutilados y, me gustaría hacerle una pregunta a usted sobre estas bestias humanoides:
¿Qué debe pasar para que un hombre normal se transforme en una bestia que hace esto?
Quienes han visto a estos sicarios los describen como gente joven de 15 a 25 años de edad.
Todos nos preguntamos: ¿dónde esta la autoridad? ¿Por qué no hace nada el presidente?
Y muchas preguntas similares, pero no escucho estas
preguntas:
¿Dónde estuvieron la madre y el padre de estos jóvenes?
¿Dónde estuvieron sus maestros?
¿Dónde estuvieron sus hermanos?
"NADIE SE ACUESTA SIENDO UN BUEN NIÑO Y DESPIERTA SIENDO UN ASESINO DESALMADO, LA TRANSFORMACIÓN ES UN PROCESO PAULATINO".
Es tiempo que dejemos de buscar culpables en otro lado y asumamos la responsabilidad de tolerar una sociedad que se fue corrompiendo y no hicimos nada por evitarlo.
NOS VOLVIMOS PADRES PERMISIVOS Y COMODINOS.
Es mejor hacerte de la vista gorda y no tener un problema con el verdugo de tu hijo o de tu hija.
BUSCAMOS SU APROBACIÓN Y SU ACEPTACIÓN.
Pues claro no “somos” mochos, ni retrógrados, si los medios hacen su lana promoviendo el sexo, pues ya somos adultos, faltaba más, si los muchachos se están apareando sin control, es que “somos” muy modernos, open mind.
¿Qué? ¿A poco te asustan las madres solteras?
¡Uy! ¡eres de la vela perpetua!
Muchas mujeres coleccionan hijos de diferentes padres y tantos otros muchachos presumen y compiten por ver quién embaraza a más muchachas.
Mujeres abandonadas que se prostituyen para mantener a sus crías. Hijos que crecen con la vergüenza y el abandono de sus madres.
Mujeres que trabajan y dejan abandonados a sus hijos, inermes a las bajas pasiones de sus vecinos o de sus mismos familiares.
Padres irresponsables, niños que crecen acumulando odio y desprecio por la sociedad.
Nos burlamos de la decencia y el decoro, sacamos a DIOS de nuestras escuelas, de nuestras casas y, lo más triste, también lo sacamos de nuestra vida. Eliminamos al policía interno que llamábamos conciencia y hoy todo se puede, entre más depravado, más "in".
El Instituto Municipal de Seguridad Pública de Juárez entrevistó a cientos de delincuentes jóvenes: ladrones, asesinos, violadores, narcotraficantes, y casi la totalidad de ellos venían de hogares disfuncionales y buscaban en las pandillas la aceptación que no tenían en su hogar. Las pandillas los obligaban en un principio a delinquir, después ellos mismos le tomaban el gusto a la adrenalina y al sentimiento de poder que da el acto de dominar a otro.
Es cierto que estamos ante un vacío de autoridad y, señores, debo decirles que la autoridad nace en el HOGAR, y ejerciendo esa autoridad deberán transmitir a sus hijos el sentido de la moral.
La moral, ese compendio de buenas costumbres que la humanidad ha ido acumulando en siglos de vida y que hoy tiramos al caño porque “somos” modernos, hoy el grito de la juventud es “ TENER SEXO Y ECHAR A PERDER TODO A TU ALREDEDOR AL FIN QUE YA SE ACABA EL MUNDO...
Los padres se quedan impávidos e inmóviles, nuevamente buscando la aceptación y la aprobación de los hijos, para estar en onda: “no sea espantado, compadre, son los nuevos tiempos”
La única solución al grave problema que hoy tenemos es regresar a ese compendio de buenas costumbres, a los valores universales, a la responsabilidad, al respeto a nuestros semejantes, al civismo, al control de nuestros hijos, a exigir a los MEDIOS DE COMUNICACIÓN que dejen de excitar a nuestros HIJOS con programas que incitan al sexo y la violencia, al libertinaje.
Vigila a tus hijos, tanto en lo que ven por la televisión como en la computadora, VIGILA SUS AMISTADES, VIGILA SUS SENTIMIENTOS, GANA SU CONFIANZA, PERO SIN OLVIDAR QUE ERES SU PADRE (O SU MADRE), EL VIGILANTE EN ESTE MUNDO DE ESA CRIATURA DE LA CUAL TÚ ERES RESPONSABLE.
EL VALOR Y LOS PRINCIPIOS DE LA MORAL FAMILIAR NO TIENEN PRECIO.
HAY QUE ORAR PARA PEDIR A DIOS QUE NOS PROTEJA DE TANTA MALDAD Y QUE NOS AYUDE A CUMPLIR CON LA PARTE QUE NOS TOCA. DIOS LOS BENDIGA.
"Cuando hay interés, a Dios lo encuentras en cualquier parte."
